THIRST (2009) ***/5

- mayo 27, 2016

Una historia sobre vampiros algo distinta

Título: Thirst
박쥐 Bakjwi
Año: 2009
País: Corea del Sur
Duración: 133 m
Director: Park Chan-Wook

**Basada en la novela Thérèse Raquin de Émile Zola

2009: Festival de Cannes. Premio del Jurado
2009: Sitges. Mejor actriz (Kim Ok Bin)

Género: terror, suspense, drama, romance, vampiros

Sang Hyun (Song Kang-Ho) es un sacerdote que contrae una extraña enfermedad que poco a poco lo va transformando en vampiro. Ahora tiene que lidiar con ello y con su nueva vida, su condición desata todos sus sentidos y la tentación por la sangre y por el amor de una mujer es muy fuerte. Tendrá que debatirse entre sus principios como humano o aceptarse y sobrevivir, aunque eso signifique dejar a un lado sus creencias como sacerdote.

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Esta es una historia sobre un cura, uno que se convierte en vampiro, nada menos, con todo lo que eso conlleva desde una perspectiva moral. Se debate entre su naturaleza y los caminos de Dios y sufre por ello, mientras tanto se enamora perdidamente de una mujer desequilibrada que lo arrastra al drama de su familia adoptiva y lo tienta. Me gustó esta película, es una forma de ver el vampirismo diferente, deja la misma sensación que la película Déjame entrar, otra de vampiros pero nada convencional, por supuesto la sueca es mucho mejor al menos bajo mi opinión, pero aún así Thrist se puede dar con un canto en el pecho porque logra un nuevo matiz a estos seres.

Personalmente, adoro el vampirismo pero reconozco que estoy algo cansada de ver la misma historia en todas las películas en las que se refleja este tema, en este caso, no se deja de lado los típicos conflictos a los que se enfrenta o se enfrentaría una posible transformación de humano a vampiro pero digamos que está contado de otra forma, sin caras blancas nuclear, sin disfraces, sino de forma realista, tal y como quizás sucedería, eso me gusta. La ambientación de la película es bien dramática y oscura, como es habitual en estos temas de chupasangres, pero se nota esa guinda que sólo el cine asiático le da, esa sensibilidad tan especial para mostrar y transmitir emociones a los espectadores, no es exactamente una película de terror pero en ciertos momentos digamos que te deja "frío", la sangre está asegurada y el erotismo también, aunque ni un ápice de ese ambiente gótico que siempre acompaña a los vampiros, para nada, en vez de eso se siente un entorno muy real, con personas reales, con un hipotético caso de un cura devoto que se ve envuelto en esta transformación.

Es curioso como en esta película el sexo es tan explícito, teniendo en cuenta que es coreana y lo conservador que es Corea y su cultura, me ha sorprendido, normalmente estas cuestiones las dejan a la imaginación del espectador con escenas sinuosas y con algún desnudo ligero, en esta ocasión han enseñado y mucho.Tengo que mencionar especialmente a las actrices coreanas en este aspecto, cuando se trata de escenas de sexo realmente lo dan todo sin ningún tipo de problema, al igual que ellos.

La banda sonora me ha pasado desapercibida, nada especial que mencionar salvo que en realidad este es un film donde realmente no hace falta una melodía especial, la música no necesita ser protagonista en esta historia, está todo muy centrado en la pareja principal y única, los momentos en silencio se gradecen porque explican muchas cosas. En ocasiones, las bandas sonoras se cargan el ambiente de la película y en este proyecto, mejor así.

Por otra parte, tengo que confesar que me ha parecido muy larga, podrían haberse ahorrado muchos minutos de rodaje, de verdad. Me ha parecido que repetían una y otra vez escenas y así se desvanece toda la magia, no hay nada peor que ver cómo a la primera te sorprende, a la media hora te acostumbras y a la hora ya miras el móvil y apartas los ojos de la pantalla. Creo que empezó genial, me atrapó por completo, pero estaba deseando que terminara.

¿La recomiendo? Sí, a quienes les guste los vampiros y tengan una tarde totalmente libre para poder ver con paciencia el film.